Turquía: Crecimiento asombroso pero en aumento la vulnerabilidad a factores externos
La economía turca registró un crecimiento substancial durante los tres primeros trimestres de 2017, con un aumento de 7.4% respecto al año anterior. Durante el tercer trimestre, la economía se expandió un 11.1%, respecto al mismo periodo del año anterior, el crecimiento más rápido entre las economías del G20. Este aumento superó en gran medida las expectativas del mercado, especialmente considerando los factores que afectaron negativamente a la actividad económica durante el año pasado.
El crecimiento durante 2017 ha sido impulsado principalmente por el apoyo del gobierno, junto con el crecimiento de las inversiones y las exportaciones. La recuperación del consumo privado también ha contribuido fuertemente al crecimiento. Coface prevé que la economía se expandirá un 6.5% en 2017 y un 5.2% en 2018.
El crecimiento de la economía turca fue particularmente impresionante, considerando que el país experimentó en 2016 una serie de impactos que amenazaron su estabilidad política y económica, así como también su seguridad. Como consecuencia Turquía registró un crecimiento negativo en el tercer trimestre de 2016, mientras que la confianza empresarial descendió y la lira perdió un 20% de su valor frente al dólar durante el año. El gobierno por lo tanto decidió implementar medidas anticíclicas, mediante el incremento del tamaño del fondo de garantías crediticias (Central Guarantee Fund, CGF por sus siglas en inglés) para así facilitar el acceso al financiamiento de las pequeñas y medianas empresa. El estado actúa como garante de las solicitudes de crédito de empresas no financieras y el tamaño del fondo de la garantía crediticia se ha multiplicado por más de diez, hasta alcanzar los 250,000 millones de liras (cerca de 64,000 millones de dólares). Hasta octubre de 2017, el CGF ya había concedido 219,000 millones de liras. El efecto de esta oferta de crédito tuvo un impacto sobre el PIB del segundo trimestre estimado en 0.7 puntos. No obstante, esta contribución no fue visible en las cifras de crecimiento del consumo privado, ya que solo aumentó en un 3% interanual durante los primeros tres trimestres de 2017. La mayoría de las medidas gubernamentales para apoyar el crecimiento económico, se produjeron en forma de CFG y reducción de impuestos (sobre electrodomésticos y mobiliario). La economía también se ha visto respaldada por el aumento de las inversiones. Durante los tres primeros trimestres del año, las inversiones aumentaron en un 7.9% interanual, frente al 2.7% interanual del mismo periodo de 2016.