La pérdida de la participación del mercado francés en África
La pérdida de la participación de mercado francés en África, alimenta el beneficio de otros países europeos, China e India.
En diciembre de 2013, el foro de la Nueva Alianza Económica se llevó a cabo en París con la finalidad de revivir el comercio entre Francia y África. A final de este foro, el entonces presidente François Hollande anunció el ambicioso plan de duplicar el comercio entre Francia y África dentro de los próximos 5 años.
Pocos meses después, la caída en los precios del petróleo extinguió toda esperanza de alcanzar este objetivo y redujo el valor total del comercio (suma de importaciones y exportaciones) entre estas dos zonas, de 73 mil millones de USD en 2013 a 54 mil millones de USD en el último año. En 2017, Francia también perdió su estatus de principal proveedor europeo del continente africano y fue superado por Alemania. Esta observación simboliza la continua erosión de las empresas francesas dentro de la participación de mercado en África: las exportaciones contabilizaron casi 11% de los flujos a África a principios del milenio, pero se han reducido a la mitad en 2017 (5.5%).
En este estudio, el análisis de los flujos comerciales por sector revela que la pérdida de influencia de Francia no sólo puede ser atribuida a China: han entrado al mercado africano otros países emergentes grandes, así como algunos vecinos europeos. Si la desaceleración del desempeño de las exportaciones francesas, particularmente en áreas clave, como los sectores automotor, farmacéutico y bienes de capital, no son una característica propia del comercio con África, la fuerte pérdida de Francia en la participación del mercado es alarmante.
Aunque la actividad de muchos países en África se está recuperando del impacto del choque externo de 2016, este estudio también se enfoca en identificar el mercado donde el comercio potencial puede ser mejor aprovechado. Asimismo nuestro análisis, se basa en un modelo gravitacional que muestra los mercados de África Oriental y del Sur, cuyos flujos de comercio son relativamente débiles, y revela que el desempeño de las exportaciones de Francia hacia Argelia y Marruecos se encuentra por debajo de su potencial.