Encuesta de pagos en Polonia 2018
Una aceleración del crecimiento del PIB con 4.6% en 2016 ha creado condiciones favorables para los negocios. Esta encuesta revela el comportamiento de pagos empresariales, el cual es el reflejo tanto de la situación económica a corto plazo y un ambiente de negocios mucho más estructurado. Es probable que los negocios en Polonia continúen disfrutando de un ambiente macroeconómico favorable.
La previsión de Coface es que la economía polaca se estabilizará este año, alcanzando un crecimiento del PIB de 3.8%, un ritmo menor que en 2017, y con una base aún más sólida. De acuerdo con nuestra encuesta, 9 de los 12 sectores consultados anticiparon que los montos de deudas pendientes disminuirán durante los siguientes meses. 51% de las compañías esperan que la rentabilidad crezca en el corto plazo, mientras que 39% anticipan su descenso. En particular, se espera que mejoren sus ventas los sectores automotor, energético y textil-vestimenta. Contrariamente, se prevén menores ventas en los próximos meses para los sectores farmacéutico, construcción y metalúrgico.
De acuerdo con nuestro análisis, cubriendo un amplio rango en cuanto a tamaño de compañías y sectores, las ventas a crédito son utilizadas ampliamente, con el total de las compañías encuestadas teniendo términos y condiciones escritas para este fin, y que el 99% de las empresas continúan enfrentando retrasos de pagos, algunos de ellos son de largo plazo e improbables de cumplir. A pesar del impulso disfrutado por la económica, las cuentas pendientes subieron en 2017. Nuestro estudio muestra que las empresas polacas experimentan un promedio de retrasos en los pagos de 62.5 días; es decir, 11 días más que las presentadas en nuestra encuesta anterior realizada en 2016. El mejor desempeño es del sector de ventas al por menor, con un promedio de retrasos en los pagos de “sólo” 15 días. Los retrasos en pagos más prolongados los experimentaron las compañías de transporte y construcción, con cerca de 146 y 116 días, respectivamente. Ambos sectores reportaron retrasos mayores que los experimentados en la encuesta de Coface en 2016. Este débil escenario de pagos corresponde con la evaluación de crédito sectorial de Coface para las industrias de la construcción y transporte polacas, la cuales están clasificadas como “riesgo alto”.
